¿Te estás soltando a ti misma por no soltarlo a él?
- Karla Maldonado C
- 28 may
- 2 Min. de lectura
Actualizado: hace 5 horas
Hay un tipo de abandono que no se nota a simple vista.
No tiene gritos, ni portazos, ni despedidas…
Es el abandono que tú misma haces de ti.
Cuando te callas lo que te duele. Cuando justificas lo que no deberías.
Cuando te olvidas de lo que eras, solo por mantener lo que tienes.
A veces, entre las rutinas, las heridas y las frustraciones, comenzamos a pensar que nuestros anhelos eran ingenuos… que soñar con una familia unida, una relación sana o un matrimonio duradero era demasiado idealista. Pero no, esos sueños no eran infantiles, eran sagrados. No nacieron del ego, sino del alma. Y aunque la vida nos confronte, nos cambie y a veces nos rompa, seguir creyendo en esos anhelos es un acto de amor profundo —no hacia la idea, sino hacia la capacidad que aún tenemos de construir algo bello.
No se trata de aferrarse a lo que fue, sino de recordar por qué comenzamos. Elegiste amar a esa persona por una razón, y aunque el camino haya dolido, si aún dentro de ti vive ese deseo de familia, de amor estable, de caminar juntos con conciencia, entonces no lo abandones. No abandones lo que el corazón soñó cuando estaba lleno de esperanza. Solo cambia el cómo, restaura el para qué… y vuelve a construir, pero esta vez contigo completa.
¿Te estás quedando en una relación donde tú ya no estás?
Si sientes que has dejado de reconocerte, que has dejado de brillar, de proponer, de soñar…
Si el “nosotros” te está borrando del “yo”, entonces no es amor: es desgaste.
Y no estás sola. Muchas lo viven en silencio, creyendo que amar es aguantar.
No se trata de dejarlo ir o soltarlo, sino de retomar tus cualidades y tu versión única e irrepetible que lo hará querer quedarse y ese sabor es delicioso.
¿Qué harías si te dijera que hay otra forma?
En el libro ¡Si lo amas, no lo dejes ir! no te enseño a dejarlo…
Te enseño a dejar de soltarte a ti por quedarte con él.
Este reto de 33 días no es terapia, ni teoría.
Es una guía emocional y práctica para ayudarte a volver a ti misma, sin dejar de amar.
Esto es lo que descubrirás:
Cómo amar sin dejar de poner límites
Cómo reconectar contigo sin necesidad de romper
Cómo comunicar sin explotar ni tragar emociones
Cómo sanar heridas del pasado que hoy siguen doliendo
¿Estás lista para volver a ti?
Tu historia no está rota.
Tu amor no ha terminado.
Pero tu forma de amar necesita ser restaurada.
Empieza hoy. Toma el libro. Ábrelo. Y vuelve a ti.

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